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Charlas de café. Hilo social y cualquier tema de interés o entretenimiento.

 #144197  por usuario
 
Y siguen los haykus.

enamorados
minucioso detalle
Fiesta de besos

 #144217  por marale
 
usuario escribió:Y siguen los haykus.

enamorados
minucioso detalle
Fiesta de besos

Me gusto

 #144614  por usuario
 
marale escribió:
usuario escribió:Y siguen los haykus.

enamorados
minucioso detalle
Fiesta de besos

Me gusto
:D :D

 #145853  por usuario
 
siguen los haykus.

Un adiós sin más
un nunca más te veré.
Tu nombre, es ayer.

 #146009  por turiddu
 
El tiempo es la maduración de la temporalidad.

Heidegger.-

 #146738  por usuario
 
¿AMAR O DEPENDER?
¿Que tan dispuestos estamos a sufrir por alguien?

Cuentan que una bella princesa estaba buscando consorte. Aristócratas y adinerados señores habían llegado de todas partes para ofrecer sus maravillosos regalos. Joyas, tierras, ejércitos y tronos conformaban los obsequios para conquistar a tan especial criatura.

Entre los candidatos se encontraba un joven plebeyo, que no tenía más riquezas que amor y perseverancia. Cuando le llegó el momento de hablar, dijo:

Princesa, te he amado toda mi vida. Como soy un hombre pobre y no tengo tesoros para darte, te ofrezco mi sacrificio como prueba de mi amor. Estaré cien días sentado bajo tu ventana, sin más alimentos que la lluvia y sin más ropas que las que llevo puestas .Ésa es mi dote...

La princesa, conmovida por semejante gesto de amor, decidió aceptar. Tendrás tu oportunidad: Si pasas la prueba, me desposarás.

Así pasaron las horas y los días. El pretendiente estuvo sentado, soportando los vientos, la nieve, y las noches heladas. Sin pestañear, con la vista fija en el balcón de su amada, el valiente vasallo siguió firme en su empeño, sin desfallecer un momento. De vez en cuando la cortina de la ventana real dejaba traslucir la esbelta figura de la princesa, la cual, con un noble gesto y una sonrisa, aprobaba la faena.
Todo iba a las mil maravillas. Incluso algunos optimistas habían comenzado a planear los festejos. Al
llegar el día noventa y nueve, los pobladores de la zona habían salido a animar al próximo monarca. Todo era alegría y jolgorio, hasta que de pronto, cuando faltaba una hora para cumplirse el plazo, ante la mirada atónita de los asistentes y la perplejidad de la infanta, el joven se levantó y sin dar explicación alguna, se alejó lentamente del lugar.

Unas semanas después, mientras deambulaba por un solitario camino, un niño de la comarca lo alcanzó y le preguntó a quemarropa:

¿Qué fue lo que te ocurrió? ..Estabas a un paso de lograr la meta. ¿Por qué perdiste esa oportunidad?. ¿Por qué te retiraste?.

Con profunda consternación y algunas lágrimas mal disimuladas, contestó en voz baja:

No me ahorró ni un día de sufrimiento... Ni siquiera una hora... NO MERECÍA MI AMOR.

El merecimiento no siempre es egolatría, sino dignidad. Cuando damos lo mejor de nosotros mismos a otra persona, cuando decidimos compartir la vida, cuando abrimos nuestro corazón de par en par y desnudamos el alma hasta el último rincón, cuando perdemos la vergüenza , cuando los secretos dejan de
serlo, al menos merecemos comprensión. Que se menosprecie, ignore o desconozca fríamente el amor que regalamos a manos llenas es desconsideración o, en el mejor de los casos, ligereza. Cuando amamos a alguien que además de no correspondernos desprecia nuestro amor y nos lastima con su indiferencia, estamos en el lugar equivocado. Esa persona no se hace merecedora del afecto que le prodigamos. La cosa es clara: si no me siento bien recibido en el corazón de alguien, empaco y me voy. La misión de todos en este mundo es encontrar la felicidad, pero la real, no la que creemos que es.

Nadie se quedaría tratando de agradar y disculpándose por no ser como les gustaría que fuera. No hay vuelta de hoja. En cualquier relación de pareja que tengas, no te merece quien no te ame ni te comprenda, y menos aún, quién te lastime. Y si alguien te hiere reiteradamente sin mala intención, puede que te merezca, pero no te conviene...
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LA ULTIMA CENA


A Leonardo Da Vinci le llevo siete años completar su famosa obra titulada "La Ultima Cena".

Las figuras que representan a los 12 apóstoles y a Jesús fueron tomadas de personas reales. La persona que sería el modelo para ser Cristo fue la primera en ser seleccionada. Cuando se supo que Da Vinci pintaría esa obra, cientos de jóvenes se presentaron ante él para ser seleccionados. Da Vinci buscaba un rostro que mostrara una personalidad inocente, pacífica y a la vez bella. Buscaba un rostro libre de las cicatrices y los rasgos duros que deja la vida intranquila del pecado. Finalmente, después de algunos meses de búsqueda seleccionó a un joven de 19 años de edad como modelo para pintar la figura de Jesús.

Por seis meses Leonardo Da Vinci trabajó para lograr pintar al personaje principal de esta magnánime obra. Durante los seis siguientes años, Da Vinci continuó su obra buscando personas que representarían a 11 apóstoles; dejando para el final a aquel que representaría a Judas.

Por semanas estuvo Da Vinci buscando a un hombre con una expresión dura y fría. Un rostro marcado por cicatrices de avaricia, decepción, traición, hipocresía y crimen. Un rostro que identificaría a una persona que sin duda traicionaría a su mejor amigo. Después de muchos fallidos intentos en la búsqueda de este modelo llegó a los oídos de Leonardo Da Vinci que existía un hombre con estas características en el calabozo de Roma. Este hombre estaba sentenciado a muerte por haber llevado una vida de robo y asesinatos. Da Vinci vio ante el a un hombre cuyo maltratado cabello largo caía sobre su rostro escondiendo dos ojos llenos de rencor, odio y ruina. Al fin había encontrado a quien modelaría a Judas en su obra.
Por medio de un permiso del rey, este prisionero fue trasladado a Milán al estudio del maestro. Por varios meses este hombre se sentó silenciosamente frente a Da Vinci mientras el artista continuaba con la ardua tarea de plasmar en su obra al personaje que había traicionado a Jesús. Cuando Leonardo dió el último trazo a su obra se volvió a los guardias del prisionero y les dió la orden de que se lo llevaran.
Mientras salían del recinto el prisionero se soltó y corrió hacia Leonardo Da Vinci gritándole:

-¡Davinci!! !Obsérvame!! ¿No reconoces quién soy?

Leonardo Da Vinci lo estudió cuidadosamente y le respondió:

-Nunca te había visto en mi vida, hasta aquella tarde fuera del calabozo de Roma.

El prisionero levanto los ojos al cielo, cayo de rodillas al suelo y gritó desesperadamente:

-Leonardo Da Vinci: ¡Mírame nuevamente, pues yo soy aquel joven cuyo rostro escogiste para representar a Cristo hace siete años...!
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EL ELEFANTE DEL CIRCO

Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que mas me gustaba de los circos eran los animales.
También a mi como a otros, después me entere, me llamaba la atención el elefante. Durante la función, la enorme bestia hacía despliegue de peso, tamaño y fuerza descomunal... pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo.
Sin embargo, la estaca era solo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa, me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de tajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.
El misterio es evidente: ¿Qué lo mantiene entonces? ¿Por qué no huye?
Cuando tenia cinco o seis años, pregunté a algún maestro, a mi padre o a algún tío por el misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapaba porque estaba amaestrado.
Hice entonces la pregunta obvia: "Si esta amaestrado, ¿por qué lo encadenan?
No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente.
Con el tiempo me olvidé del misterio del elefante y la estaca... y solo lo recordaba cuando me encontraba con otros que también se habían hecho la misma pregunta.
Hace algunos años descubrí que por suerte para mi alguien había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta: "El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy pequeño".
Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca. Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo.
La estaca era ciertamente muy fuerte para él......juraría que se durmió agotado y que al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que seguía...hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal acepto su impotencia y se resigno a su destino. Este elefante enorme y poderoso no escapa porque CREE QUE NO PUEDE. Tiene registro y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que se siente poco después de nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro. Jamás... Jamás intentó poner a prueba su fuerza otra vez...
Cada uno de nosotros somos un poco como ese elefante: vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad. Vivimos creyendo que un montón de cosas "no podemos hacer" simplemente porque alguna vez probamos y no pudimos. Grabamos en nuestro recuerdo "no puedo... no puedo y nunca podré", perdiendo una de las mayores bendiciones con que puede contar un ser humano: LA FE.

 #146796  por borshis
 
"Hay dos maneras de ser rico. Una es tener todo lo que uno quiere, y la otra es estar satisfecho con lo que uno tiene. "

¨La grandeza no se encuentra en los bienes que se poseen, en el poder, la posición ni el prestigio. Reside en la bondad, la humildad, la abnegación y la fuerza del carácter."


"La fe es aceptar lo imposible, arreglárselas sin lo indispensable y sobrellevar lo intolerable."

[/b]

 #146816  por gadriana
 
Bueno algunos risueños para empezar la mañana:

Dedicado a Dal: "Ahorre luz -- apague su picana"

Algunos más:
A mi, los camiones me revientan - Un Sapo

Ahora que se todas las respuestas me cambiaron las preguntas

Al fin y al cabo un espermatozoide es una partícula de polvo.

Antes era indeciso, ahora... no sé.

Basta ya de realidades! Queremos promesas! (Los pobres)

Cada hombre pretende ser el primer amor de una mujer. Cada mujer pretende ser el último amor de un hombre

CAMINANTE NO HAY CAMINO" (ministerio transporte y obras públicas)

Creo en la reencarnación. (una uña)

CUANDO YO GOBIERNE EL MUNDO TODOS TEMBLARAN. - Parkinson

Dar las gracias despues de hacer el amor, eso es, Educacion sexual

Dejen de sacarme el cuero! (una vaca)

Después de mi... fa. (el profesor de música)

Dios mío, dame paciencia... Pero dámela YA!

Hasta mañana si yo quiero (Dios)

El alcohol mata lentamente... No importa, no tengo apuro.

El coche nunca reemplazará al caballo (La yegua)

El hombre madura cuando se casa, después se pudre.

INTERRUMPI MI EDUCACION PARA IR A LA ESCUELA

La blanca nos da vuelta. (los 7 enanitos)

La frigidez es una historia de nunca acabar.

La mujer de Einstein tenía un físico bárbaro.

 #146959  por usuario
 
"El homo sapiens, la única criatura dotada de razón, es también el único ser que aferra su existencia a cosas irracionales." (Henri Bergson)

 #146985  por juampi
 
Aca va una:



" Si hacer fuese tan fácil como saber lo que es preferible, las capillas serían iglesias, y las cabañas de los pobres, palacios de príncipes ".

A mi me encanta, no recuerdo bien, pero creo que es del libro " El mercader de Venecia ".

JP.

 #147002  por usuario
 
juampi escribió:Aca va una:



" Si hacer fuese tan fácil como saber lo que es preferible, las capillas serían iglesias, y las cabañas de los pobres, palacios de príncipes ".

A mi me encanta, no recuerdo bien, pero creo que es del libro " El mercader de Venecia ".

JP.
Si es de "El mercader de Venecia" dicha por Porcia.
En Maridaje cultural ,postie el argumento.

 #147098  por marisa99
 
Soñar con la persona que quieres ser
es desperdiciar la persona que eres

 #147149  por marale
 
[quote="usuario"]¿AMAR O DEPENDER?
¿Que tan dispuestos estamos a sufrir por alguien?

Cuentan que una bella princesa estaba buscando consorte. Aristócratas y adinerados señores habían llegado de todas partes para ofrecer sus maravillosos regalos. Joyas, tierras, ejércitos y tronos conformaban los obsequios para conquistar a tan especial criatura.

Entre los candidatos se encontraba un joven plebeyo, que no tenía más riquezas que amor y perseverancia. Cuando le llegó el momento de hablar, dijo:

Princesa, te he amado toda mi vida. Como soy un hombre pobre y no tengo tesoros para darte, te ofrezco mi sacrificio como prueba de mi amor. Estaré cien días sentado bajo tu ventana, sin más alimentos que la lluvia y sin más ropas que las que llevo puestas .Ésa es mi dote...

La princesa, conmovida por semejante gesto de amor, decidió aceptar. Tendrás tu oportunidad: Si pasas la prueba, me desposarás.

Así pasaron las horas y los días. El pretendiente estuvo sentado, soportando los vientos, la nieve, y las noches heladas. Sin pestañear, con la vista fija en el balcón de su amada, el valiente vasallo siguió firme en su empeño, sin desfallecer un momento. De vez en cuando la cortina de la ventana real dejaba traslucir la esbelta figura de la princesa, la cual, con un noble gesto y una sonrisa, aprobaba la faena.
Todo iba a las mil maravillas. Incluso algunos optimistas habían comenzado a planear los festejos. Al
llegar el día noventa y nueve, los pobladores de la zona habían salido a animar al próximo monarca. Todo era alegría y jolgorio, hasta que de pronto, cuando faltaba una hora para cumplirse el plazo, ante la mirada atónita de los asistentes y la perplejidad de la infanta, el joven se levantó y sin dar explicación alguna, se alejó lentamente del lugar.

Unas semanas después, mientras deambulaba por un solitario camino, un niño de la comarca lo alcanzó y le preguntó a quemarropa:

¿Qué fue lo que te ocurrió? ..Estabas a un paso de lograr la meta. ¿Por qué perdiste esa oportunidad?. ¿Por qué te retiraste?.

Con profunda consternación y algunas lágrimas mal disimuladas, contestó en voz baja:

No me ahorró ni un día de sufrimiento... Ni siquiera una hora... NO MERECÍA MI AMOR.

El merecimiento no siempre es egolatría, sino dignidad. Cuando damos lo mejor de nosotros mismos a otra persona, cuando decidimos compartir la vida, cuando abrimos nuestro corazón de par en par y desnudamos el alma hasta el último rincón, cuando perdemos la vergüenza , cuando los secretos dejan de
serlo, al menos merecemos comprensión. Que se menosprecie, ignore o desconozca fríamente el amor que regalamos a manos llenas es desconsideración o, en el mejor de los casos, ligereza. Cuando amamos a alguien que además de no correspondernos desprecia nuestro amor y nos lastima con su indiferencia, estamos en el lugar equivocado. Esa persona no se hace merecedora del afecto que le prodigamos. La cosa es clara: si no me siento bien recibido en el corazón de alguien, empaco y me voy. La misión de todos en este mundo es encontrar la felicidad, pero la real, no la que creemos que es.

Nadie se quedaría tratando de agradar y disculpándose por no ser como les gustaría que fuera. No hay vuelta de hoja. En cualquier relación de pareja que tengas, no te merece quien no te ame ni te comprenda, y menos aún, quién te lastime. Y si alguien te hiere reiteradamente sin mala intención, puede que te merezca, pero no te conviene...
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Lila sencillamente hermosa :oops:

 #147592  por Doncella_de_Orleans
 
Uffff

 #147859  por Azeta
 
"...la ley no es un caucho tan elástico y la técnica puramente interpretativa no es de una flexibilidad tal que, a fuerza de tirar sobre el texto, se llegue siempre a solucionar el caso, pues el rendimiento de la ley no es ilimitado ." (SCBA causas Ac. 41480, en AyS 1989-II-613; Ac. 51058, en AyS 1994-IV-426).
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