El flaco Abel Cháneton

[Alberto Auní©]

Esta mañana (20 de mayo) en su programa de Radio Continental, Víctor Hugo Morales, que siempre indaga en las cosas de la historia, hizo un reportaje a un señor de apellido Cháneton para que le cuente cosas sobre su abuelo.
Este fue abogado. Según pude saber por internet, para ampliar la información, fue historiador y jurisconsulto argentino, viviendo entre 1888 y 1943.
Escribió obras que fueron libros de texto universitarios, como "En torno a la reforma del Código Civil", "La instrucción primaria en la época colonial", "Historia de Vélez Sarsfield" y "Retorno de Echeverría".
Su esposa falleció no hace mucho, a los cien años de edad, habiéndole sobrevivido más de medio siglo.
Hasta aquí este post parece un memorial más, pero después de haber escuchado al nieto de este abogado y a Víctor Hugo Morales no quise dejar de comentar algo en este portal de profesionales del Derecho.
Muchas veces la formalidad de una profesión hace olvidar otros aspectos de la vida de la persona que la ejerce, más humanos.
También es importante conocer con quiénes se rodea una persona, qué núcleo componen sus amigos.
En 1948 Enrique Santos Discépolo escribió el tango "Cafetín de Buenos Aires", con música de Mariano Mores.
Cinco años antes había fallecido el abogado al que hace referencia este post y al que se recordara en el programa radial mencionado.
Recordemos parte de la letra de este tango:

"Me diste en oro un puñado de amigos,
que son los mismos que alientan mis horas,
José, el de la quimera;
Marcial, que aún cree y espera;
y el flaco Abel, que se nos fue,
pero aún me guía".

El flaco Abel era el doctor Abel Cháneton.

[Dr. 8]

Sinceramente brillante, quizás algún día mis amigos me recuerden de tal forma. Aunque, en honor a la sinceridad, espero ser yo quien los recuerde con algún verso o alguna milonga.

[COLUMBO]

Esta mañana (20 de mayo) en su programa de Radio Continental, Víctor Hugo Morales, que siempre indaga en las cosas de la historia, hizo un reportaje a un señor de apellido Cháneton para que le cuente cosas sobre su abuelo.
Este fue abogado. Según pude saber por internet, para ampliar la información, fue historiador y jurisconsulto argentino, viviendo entre 1888 y 1943.
Escribió obras que fueron libros de texto universitarios, como "En torno a la reforma del Código Civil", "La instrucción primaria en la época colonial", "Historia de Vélez Sarsfield" y "Retorno de Echeverría".
Su esposa falleció no hace mucho, a los cien años de edad, habiéndole sobrevivido más de medio siglo.
Hasta aquí este post parece un memorial más, pero después de haber escuchado al nieto de este abogado y a Víctor Hugo Morales no quise dejar de comentar algo en este portal de profesionales del Derecho.
Muchas veces la formalidad de una profesión hace olvidar otros aspectos de la vida de la persona que la ejerce, más humanos.
También es importante conocer con quiénes se rodea una persona, qué núcleo componen sus amigos.
En 1948 Enrique Santos Discépolo escribió el tango "Cafetín de Buenos Aires", con música de Mariano Mores.
Cinco años antes había fallecido el abogado al que hace referencia este post y al que se recordara en el programa radial mencionado.
Recordemos parte de la letra de este tango:

"Me diste en oro un puñado de amigos,
que son los mismos que alientan mis horas,
José, el de la quimera;
Marcial, que aún cree y espera;
y el flaco Abel, que se nos fue,
pero aún me guía".

El flaco Abel era el doctor Abel Cháneton.

Como mencionè en algùn otro hilo y por motivos mucho menos relevantes que el de èste, "... se conoce a un hombre por sus amigos y sus enemigos...." y que la valoraciòn de los otros, es el capital màs genuino que un hombre pueda incrementar.
Ademàs, sirve la menciòn, para poner el acento en que los valores autènticos de las personas no tienen que ver con juicios superficiales de hipòcrita moralina.
Discèpolo, fue un hombre sensible, afectuoso, comprometido, inolvidable y talentoso y, no era, una carmelita descalza, ni mucho menos, conociò todos los vicios y viviò todos los mundos, pero trascendiò y su poesìa "...aùn nos guìa...", como el flaco Abel......
Saludos
COLUMBO

[Dr. 8]

Coincido en un todo, con lo manifestado por Columbo.

Sinceramente, me hubiese gustado que Discépolo fuera mi amigo. Que importa los vicios y la noche de un artísta de tal embergadura, cuantos tipos hay que nos acostamos a las 10 de la noche y carecemos de la genialidad del maestro.

[DAL]

Me encantó el post. Sr. Aumé. NO siempre reparamos en el costado humano de la gente que hace las cosas que importan, como ud. bien dice.

[Sailaw]

Chicos, ustedes son mis amigos, y sin embargo no paso de las 11 de la noche en pie.

[MICK]

Muy buen post. Victor Hugo , es un genio. El programa es genial.

[gadriana]

Gracias Sr. Auné. Como siempre un placer leerlo

[Alberto Auní©]

...a quienes leyeron este hilo y también a quienes respondieron.

Los viejos tiempos de bohemia y amistad, que hicieron a la cultura argentina, parecen haberse ido y no veo por el momento pasaje de regreso, al menos como eran entonces.
Las redacciones de diarios, los grupos de escritores y poetas como el de Boedo, las cenas en bodegones como El Puchero Misterioso, que cuentan sus asistentes, derivando luego en tertulias culturales entre un vino y otro, forman un pasado que no debemos olvidar.
No olvidemos las cenas a la salida del diario Crítica, con una redacción en que había gente como Conrado Nalé Roxlo, Roberto Arlt, Jorge Luis Borges y tantos otros.
Los cafés, inmortalizados en "Cafetín de Buenos Aires", son parte de esta histórica movida.
Muchos de sus asistentes eran profesionales, como médicos, abogados y de otras carreras universitarias. Sabían distribuir su tiempo y así se forjaron grandes amistades, como las que cuenta Discépolo en este tango.

Hoy las urgencias son distintas y así estamos... No ha cambiado nada lo descripto por José M. Aguilar y Enrique Cadícamos, en otro tango, "Al mundo le falta un tornillo":

“ Hoy se vive de prepo y se duerme apurado, y la barba hasta a Cristo se la han afeitado... Al mundo le falta un tornillo, que venga un mecánico a ver si lo puede arreglar”.



Alberto Auné

[poorlaw]

Hola a todos!

¿Algún día alguna letra de alguna canción recordará las amistades forjadas en el Portal? ¿Podremos sacar pasaje de regreso a las buenas costumbres de aquéllos tiempos?

Saludos!

[gadriana]

Poorlaw, para mí no hay que sacar pasaje de regreso alguno. La letra tenemos que ser capaces de componerla nosotros y hacer camino al andar...
Tal vez la poesía de un genio como Discépolo no será la misma, pero en cuanto a las costumbres, en eso sí somos nosotros responsables, por acción u omisión...
No te preocupes, seguramente en breve alguna letra aquelarreana subiremos al post de canciones...Salvo que lo que salga sólo pueda circularse por MP

[DAL]

...Salvo que lo que salga sólo pueda circularse por MP

que sería lo más probable!!!

[Doncella_de_Orleans]

Hola a todos!

¿Algún día alguna letra de alguna canción recordará las amistades forjadas en el Portal? ¿Podremos sacar pasaje de regreso a las buenas costumbres de aquéllos tiempos?

Saludos!

[claudiarf]

Los viejos tiempos de bohemia y amistad, que hicieron a la cultura argentina, parecen haberse ido y no veo por el momento pasaje de regreso, al menos como eran entonces.
No creo que ea así, Alberto, o al menos para mí. Estuve tres días sin internet y realmente extrañé a todos los foristas, por las dudas planteadas, por las recetas, por wl aliento, pr los cuentos, por la cultura, viajes y sobre todo por la Risa!!!!! Cariños

[GonzaloS]

Hola a todos!

¿Algún día alguna letra de alguna canción recordará las amistades forjadas en el Portal? ¿Podremos sacar pasaje de regreso a las buenas costumbres de aquéllos tiempos?

Saludos!

Es dudoso.
Si el pasaje es el viejo hilo social y quien expende los tickets el administrador como que no.