Érase una vez en el Portal de Abogados un ser inanimado, pero que hacía las gracias a los abogados.
A veces estaba alegre
, a veces muy alegre 
, y de cuando en cuando, se reía. 
Su nombre era Emo Tycón.
El día de su cumpleaños, sopló las velitas
y se fue a tomar un café con sus amigos 
...
Pero en el bar, la vio a ella
. Era la chica de Mesa de Entradas del juzgado de enfrente, la que le sellaba con amor y con cariño todos los oficios.
Pensó en correr a abrazarla.
Pero no, era demasiado. Ella estaba leyendo 
y por lo que vio en la lejanía era un libro de amor.
Los otros notaron esto, lo animaron a que le hablara, deseándole suerte
, pero él seguía quieto.
Se sonrojó de lo tonto que se veía
, sin poder decirle palabra. 
, por timidez y confusión de sus sentimientos 
.
De pronto, la chica se fue
, y él pasó de la alegría a la tristeza 
.
Pero pensó: mañana es día de nota, y tengo que ir a Tribunales. Me despertaré temprano
, le llevaré flores 
y le confesaré mi amor. Aunque el resto se ría de mí... 
Y salió esa mañana, dispuesto a todo.
Se sorprendió
con las preguntas 
que rondaban su mente. Se maldijo a sí mismo, pero se le ocurrió una idea 
: sacarle una foto 
y guardarla, para que si no funcionaba su amor, al menos tuviera un recuerdo.
Llevó la cámara y se acercó a la ventanilla rápida.
-Hola -dijo
-Hola doctor. ¿qué causa busca?
-Busco la causa de por qué estoy en este mundo. Y llegué a la conclusión que es sólo para amarte.
Sonó demasiado canchero
La chica se sonrojó. Y cuando él, esperaba la contestación, con el ramillete en la mano, ella le dijo:
-Disculpe doc, el expediente no está en letra.
Y así, sin concreción, terminó su amor. Al final, perdió el juicio.
A veces estaba alegre
, a veces muy alegre , y de cuando en cuando, se reía. Su nombre era Emo Tycón.
El día de su cumpleaños, sopló las velitas
y se fue a tomar un café con sus amigos ...Pero en el bar, la vio a ella
. Era la chica de Mesa de Entradas del juzgado de enfrente, la que le sellaba con amor y con cariño todos los oficios.Pensó en correr a abrazarla.
Pero no, era demasiado. Ella estaba leyendo y por lo que vio en la lejanía era un libro de amor.Los otros notaron esto, lo animaron a que le hablara, deseándole suerte
, pero él seguía quieto.Se sonrojó de lo tonto que se veía
, sin poder decirle palabra. , por timidez y confusión de sus sentimientos .De pronto, la chica se fue
, y él pasó de la alegría a la tristeza .Pero pensó: mañana es día de nota, y tengo que ir a Tribunales. Me despertaré temprano
, le llevaré flores y le confesaré mi amor. Aunque el resto se ría de mí... Y salió esa mañana, dispuesto a todo.
Se sorprendió
con las preguntas que rondaban su mente. Se maldijo a sí mismo, pero se le ocurrió una idea : sacarle una foto y guardarla, para que si no funcionaba su amor, al menos tuviera un recuerdo.Llevó la cámara y se acercó a la ventanilla rápida.
-Hola -dijo
-Hola doctor. ¿qué causa busca?
-Busco la causa de por qué estoy en este mundo. Y llegué a la conclusión que es sólo para amarte.
Sonó demasiado canchero
La chica se sonrojó. Y cuando él, esperaba la contestación, con el ramillete en la mano, ella le dijo:-Disculpe doc, el expediente no está en letra.
Y así, sin concreción, terminó su amor. Al final, perdió el juicio.
Alea jacta est
