DoctorPiccafeces escribió:Es mas común de lo que creen.Fuí "víctima" más de una vez de esos colegas Doc ... me revocaron el poder en el medio del río..... mejor no opino y me tomo un
Hay un accidente de tránsito y brotan los abogados, avisados por gente de los hospitales y de las comisarías. Hay un muerto y brotan los que ofrecen servicios fúnebres, avisados por la misma gente. Sale publicado un edicto de remate y el deudor recibe en su casa una cantidad de correspondencia de colegas ofreciéndo sus servicios. Cuando falleció mi padre durante meses recibí ofertas de cuanto cementerio privado existe, seguramente avisados por gente del hospital. Sucede en todas las profesiones y también en la nuestra.
El abogado tiene a alguien dentro del hospital que le informa del accidentado y lo va a visitar, le ofrece demandar y si está de acuerdo, firman los instrumentos y lo hacen con un escribano de por medio. El escribano está presente porqye el abogado no lo conoce al cliente mas que por el nombre, no tiene confianza ni certeza en la continuidad de la gestión encomendada y, al margen de sus honorarios y lógico derecho a preservarlos, el profesional precisa asegurarse de alguna manera que su gestión no va a ser desautorizada luego, lo cual guarda cierta lógica. En los EEUU a los colegas que hacen lo mismo se los llama "ambulance chasers". Es algo que pasa, aca y en todos lados.
Aclaro que no cuido mi propio sayo, ya que me dedico a otra cosa totalmente ajena a los accidentes de tránsito e incluso en un posteo muy anterior y en otro thread comenté, en tono de comedia, de un fulano que me sacó de internet, enfermero viejo de un hospital público, que apareció en mi estudio ofreciendo esos "servicios" a cambio de un "canon mensual" que rechazé amablemente (me molesta movilizarme desde mi casa a mi propio estudio, mucho mas me va a molestar recorrer hospitales), pero no me parece mal que quien se dedica a eso extreme sus recaudos para evitar que, en casos como este -donde un colega le revoca el patrocinio en un juicio que éste ha iniciado- el abogado quede desprotegido en su trabajo o, peor aun, se lo pudiera desconocer con ulterioridad.
Pero yo lo propuse desde una perspectiva práctica, no tanto desde la ética profesional, ya que acusar al anterior abogado de valerse de un vicio de la voluntad en el cliente para firmar el poder, cuando tal vicio no existió, es imputarle tentativa de estafa, tanto a el como al escribano que dio fe en la firma del poder, y eso pone en riesgo al cliente de ser querellado por calumnia.
Sí, que no? ®