Os contare una historia sobre negativa de divorcio, acciones tomadas y cambios de ultima hora.
El año 1980, solicite mi divorcio al hombre con el cual me habia casado, hubo negativa, no fue posible, emprendí separación de cuerpo de acuerdo al mando legal, el hombre se fue a la ciudad de Caracas, seguí acciones sin éxitos, acudí ante un abogado para seguir pasos, este me aconsejo esperar, acepte.
El año 1988 por el mes de junio acudí a otro abogado para tramitar el divorcio el cual debía logrado una parte de la aceptación para dar con el finiquito del contrato matrimonial, interponía yo la demanda donde el hombre se negó de nuevo sobre el finiquito amistoso, este me dijo que pagara todo los gastos, acepte, para ir a una solución definitiva, el abogado que llevaba el asunto le dirigió un telegrama citándole al bufete para tratar los termino, no asistió; el abogado me llamo a mi trabajo, pedí permiso y me dirigí al bufete donde el abogado tenia otra forma de demanda y que nos llevaría a otras instancias, circunstancias y mas gastos para mi bolsillo.
El abogado que redactaba el documento de divorcio me colocaba como la demandada y dio un nuevo giro al divorcio cayendo en el Articulo 185-A, del Código Civil venezolano, firmaba el aviso donde me daba por citada donde mi marido me demandaba ¿el lo sabia?, NO, juego macabro de la justicia ante la negativa caprichosa de un esposo que deseaba causarme gastos, contratiempo, en la causal de motivos se expuso ROTURA PROLONGADA DE LA VIDA COMÚN, donde mi marido con la anterior demanda no asistió a las notificaciones motivo por el cual el abogado del caso dio otro giro e hizo un arte de artilugios muy propios del derecho.
En la ultima citación se le envió a la otra parte un telegrama como ultimo llamado a comparecer ante el juez, el hombre hizo acto de presencia ya que el abogado tomaría otras acciones para cobrar los daños ocasionados sin excusas determinadas ni expuesta ante el tribunal donde reposaban los telegramas enviados y no atendidos; el día señalado no hubo palabras cruzadas, el juez del caso Doctor Mario Melendez Guedez, sentencia firme dejada de disolución del contrato matrimonial, expediente Nº 5480, con manutención alimentaria para hijos menores, fechas de visitas insertadas en un calendarios para evitar sorpresas y otras intenciones de índoles extrañas que atentaría contra mi integridad.
Leída la sentencia el hombre procedió a firmar, dejando claro al abogado que se encontraba desempleado [para no atender al asunto de la manutención], ¿era cierto?, no del todo ya que poseía un contrato como docente, para terminar con el juicio y dar por finiquitado el asunto acepte la excusa del desempleo y emprendí a levantar a mis hijos sola; pague costo total de gastos generados por concepto de divorcio, traslados, telegramas y otros derivados por otros conceptos, cancelado todo con recibo dado por el abogado de la causa y finiquitado el vinculo matrimonial y una restricción del tribunal para que el hombre del cual me habia divorciado no se acercara a mi.
Un día encontrándome en mi labores en una empresa privada recibí un llamado para atender una llamada telefónica del abogado de la ex-causa de divorcio con el cual ya no tenia ningún tipo de vinculo ya que habia pagado en efectivo cada concepto especificado y cobrado para el día de la firma en el tribunal que ejecuto el contrato matrimonial donde se me entrego un recibo por concepto de pago por honorarios de abogados mas gastos generados por la demanda; atendí al abogado el cual me citaba en su bufete ¿para que?, lo desconocía, de nuevo pedí permiso para atender al hombre del derecho en el centro de la ciudad de Barquisimeto donde este tenia su oficina, al llegar al bufete el abogado deseaba un cobro extra ¿a que me refiero?, el abogado deseaba una aventura, situacion que me llevo al colegio de abogados para exponer la gravedad del asunto ya que no tenia ningún asunto pendiente y no debía dinero por trabajo realizado, se dirigió una carta al abogado para poner un limite en sus desmedidas acciones de abuso, atendida y restricción de cualquier tipo donde el abogado acato la advertencia si seguía el hostigamiento sexual.
En todo divorcio ademas del conyugue surgen inconvenientes después de finiquitado el contrato matrimonial, llevándonos a tomar acciones ajenas a nuestras verdaderas intenciones para librar una batalla mas de abusos y violaciones.
Chinca