Les quiero contar mi experiencia relacionada con este tema:
Conjuntamente con una colega, me embarqué en la aventura de organizar lo que pensamos que sería una "pequeña" colecta entre los amigos y/o conocidos de nuestra ciudad para enviar algo de ayuda a Tartagal. Mandamos algunos SMS a nuestros contactos personales y la respuesta fue inmediata y sorprendente. En cuestión de horas empezaron a LLOVER las donaciones.
Realmente es conmovedor. La gente es MUY solidaria!!!
No sólo en mi ciudad, que por cierto es una ciudad chica, sino en todos lados. Los argentinos, todos, aún conservamos los valores que nos inculcaron siempre (bue, por lo menos en estos casos); seguimos teniendo un gran corazón.
La gente se olvidó de las ideologías, de las religiones, de todas las arbitrariedades que nos separan, y colaboró desinteresadamente.
En sólo 3 días juntamos un montón de ropa, pañales, leche, agua mineral, alimentos no perecederos. Incluso conseguimos de parte de productores cañeros 2 toneladas de azúcar ya fraccionada en bolsas de 10 kg.
La "pequeña" colecta, gracias al comentario que circuló "de boca en boca", terminó siendo un gran gesto de solidaridad.
Y no quisimos mandar las donaciones a nadie, sino llevarlas NOSOTRAS MISMAS!
El intendente de la ciudad colaboró con el transporte: camión para las donaciones, y camioneta con chofer para nosotras. Así que hoy tempranito partimos hacia Tartagal.
Bue... una cosa es contarlo; y otra, estar ahí.
Nos recibió el intendente Sergio Leavi y nos llevó a una escuela donde está viviendo gente que perdió todo. (todas las escuelas están llenas de gente que quedó totalmente en la nada). Son familias enteras. Hay muchos niños. Entre todos descargamos el camión. La directora y todo el personal de la escuela está trabajando a la vez que hacen de "anfitriones". Es tremendo. Lloramos como condenadas.
Pero fue genial que la gente pudiera recibir la ayuda directamente de nuestras manos. De alguna manera, eso nos acerca un poquito más. (Además aquí estamos tan lejos y tan olvidados como ellos).
La verdad es que fue una experiencia muy fuerte.
Después fuimos al Ejército. Hay mucha ayuda que llega constantemente desde todo el país. Nos contaron que los depósitos ya se llenaron y se vaciaron y se volvieron a llenar varias veces.
Se ve gente trabajando todo el tiempo, en todos lados. La Municipalidad, el Ejército, la Cruz Roja. Pero los damnificados son muchos.
A los que aportaron su granito de arena, gracias.
La próxima semana le voy a mandar a Aleuba algunas fotos para que suba; yo no tengo idea de cómo hacerlo, je.
Sorry si me explayé mucho; pero sentía la necesidad de contarlo. Sé que muchos de uds. colaboraron desde sus ciudades y me pareció bueno contarles esto.