Si, habría que ir ante un escribano y hacer
una donación a los hijos menores con reserva del usufructo de por vida (así las dulces criaturas que son hoy no los hechan el día de mañana de la casa) Puede parecer cruel lo que digo, pero pasa.
Por otro lado, ¿quieren ahorrar la futura sucesión? Siempre se podrá hacer un cuestionamiento a la donación por parte de los hijos... sobre todo si luego llega un cuarto.
Saludotes!